Nunca te olvidaré

Aquella tarde, mientras paseaba por el parque, escuché a unos ancianos que contaban una historia ocurrida muchos años atrás, y que decía así:

Dos aldeas cercanas en las que los vecinos mayores tenían una gran rivalidad debido a un problema que ya nadie recordaba. Las personas de las aldeas no se relacionaban apenas. Ocurrió que un día que una chica paseaba por la orilla del mar, divisó una ola de gran tamaño. No le dio tiempo a escapar y fue arrastrada hacia las rocas. Un chico que caminaba por allí escuchó sus lamentos y la ayudó a salir.

Ella se lo agradeció y comenzaron a charlar. Cada uno era de una de las aldeas rivales, pero a pesar de esto, desde aquel día volvieron a encontrarse frecuentemente.

Una tarde que estaban reunidos, les descubrió el padre de la chica y éste la prohibió a volver a ver al chico. Los padres de éste se enteraron que estaban enamorados y le obligaron a irse a trabajar a un barco que zarpó a alta mar.

Cuando la chica se enteró cayó en una profunda tristeza. Sus amigas, para ayudarla, intentaron contactar con los amigos de él y ver si tenían alguna noticia, pero no lo consiguieron.

Al cabo de un tiempo, los amigos del chico le dijeron que el barco había atracado en las costas de Brasil y que estaría allí durante unos meses.

Se escribieron algunas cartas recordándose su amor y lamentándose por no poder estar juntos.

Pasaron días y meses en los que no llegaron las cartas. Hasta que una trágica noticia llegó a sus oídos. El barco en el que viajaba su amado, había sido invadido por una terrible enfermedad. Entre los fallecidos de la lista se encontraba su nombre.

M.H., 2ºC